Desde el Mercado Puerto de Valparaíso, un viaje por los oficios, rostros y paisajes del maritorio chileno, reúne la primera muestra fotográfica itinerante: “Caletas de Chile: Patrimonio Cultural Costero”, dedicada a la pesca artesanal, su gente y al patrimonio cultural, social y económico que representa esta actividad en más de 540 caletas pesqueras existentes de norte a sur en Chile, 34 de ellas en la región de Valparaíso. La muestra, se enmarca en el quinto aniversario del Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal y de la Acuicultura de Pequeña Escala, Indespa, y reúne escenas cotidianas de la pesca desde el norte hasta el Cabo de Hornos, resultado del concurso convocado en julio por el instituto. La entrada es liberada y estará abierta hasta el 16 de agosto, de 10:00 a 17:00 horas, en el segundo piso del Mercado Puerto, l barrio fundacional de la ciudad. “Estamos cumpliendo cinco años, trabajando en promover iniciativas de fomento y desarrollo productivo, agregación de valor y diversificación productiva en el sector pesquero y acuicultor de pequeña escala, y quisimos destacarlo con esta muestra fotográfica que desde la mirada ciudadana nos invita a reconocer esta actividad productiva, su valor cultural y a incentivar también el turismo y fomentar el consumo de productos de la pesca artesanal”, precisa Leonardo Llanos Huerta, Director Nacional del Indespa. En este marco, el Instituto realizó el conversatorio “El mar y sus productos en la alimentación chilena y el turismo”, junto a exponentes de la pesca artesanal y del turismo. Chile cuenta con caletas de norte a sur, con una despensa marina enriquecida gracias a la corriente de Humboldt, y productos como el loco, el piure o el pastel de jaiba reconocidos a nivel mundial. Sin embargo, el consumo de pescados y mariscos sigue bajo con cerca de 14 kilos al año y nueve de cada diez viajes de turismo de las y los chilenos es fuera de Chile. Pamela Villagra Castillo, es directora de La Ruta de los Abastos (rutadelosabastos.com) de la región de O´Higgins, destacada hace unos días por la Revista Time como uno de los cien mejores lugares del mundo a visitar este 2O24. Este circuito de turismo gastronómico rural promueve diez rutas de productos, destinos y cocinas, incluida la Ruta de las algas y Un día en el oficio de marero, junto a algueros y recolectores de orilla de la cooperativa Los Piures en Pichilemu. “Es una herramienta de desarrollo viable, eficiente, de bajo costo y de gran para los territorios rurales… Nosotros lo primero que hacemos es diversificar la oferta productiva…no podemos producir mejor ni pescar mejores peces, lo que tenemos ya es muy bueno, pero el precio de mercado no es justo, el turismo lo que hace es darle valor agregado a este saber de las comunidades y lo pone en valor a través de la experiencia de turismo”, señala Villagra. Para Carlos Castro González, tercera generación de pescador artesanal de la caleta El Membrillo (@sanpe.dro2019) y promotor de la Fogata del Pescador, que en su última versión reunió 16 mil asistentes, “en la caleta siempre tenemos muchas ideas en turismo, estos eventos donde puede disfrutar toda la familia, el interés por seguir haciendo cosas así está pero se requiere de apoyo …la pesca está envejeciendo, es importante la renovación del registro para que el oficio no se pierda, y también que las escuelas vuelvan a visitar las caletas para aprender de sus productos y quehacer”, señala. Una apuesta en la que coincide Meyling Tang Ortíz, socia fundadora de Tres Peces (@trespeces), el primer restaurante de pesca responsable nacido en Valparaíso, quien apuesta por el turismo gastronómico o turismo azul, como dice, a partir del trabajo cooperativo y en red con pescadores y pescadoras artesanales, que ponga en el centro el relato, la tradición y la actividad pesquera y acuícola de pequeña escala detrás de cada producto marino que llega a la mesa. En la misma línea, Felipe Narbona Muñoz, fundador y director del operador turístico Ecomapu Travel (ecomapu.com) y presidente de la Asociación Gremial Barrio Puerto, señala como trinchera, la oferta desde los barrios y su identidad, como fue el año pasado la celebración del día de las Calugas de Pescado en el Barrio Puerto o la ruta Platos con Relato de Turismo Gastronómico por el Barrio Puerto y las visitas junto a pescadores en la Caleta Portales. “Existe interés por estas experiencias, principalmente en turistas extranjeros, pero tenemos que avanzar en los permisos que faciliten su oferta”, comenta. Pamela Villagra confía en que el modelo de turismo gastronómico es el camino. “Estamos recibiendo a norteamericanos y brasileños en un lugar donde no habían llegado, visibilizando los pueblos, lo rural, que es el nuevo lujo de Chile, y los atributos mareros artesanales, de familias de pescadores, oficios ancestrales, que es lo que la gente quiere venir a viajar y a conocer. Estamos diciendo que hay una nueva forma de viajar que es comiéndose Chile y aprovechando su patrimonio alimentario”, concluye Villegas. En la actividad, participaron representantes de la municipalidad de Valparaíso, el seremi de Economía, Fomento y Turismo, Marcelo Arredondo, pescadores artesanales de las caletas Portales, Membrillo, Quintay y Juan Fernández, la Mesa de Mujeres de la Pesca Artesanal, representantes del gremio turístico, de Sernapesca, Subpesca, IFOP e Indespa, Fundación Capital Azul, y docentes de la Universidad de Valparaíso, entre otros asistentes.
Desde el Mercado Puerto de Valparaíso, un viaje por los oficios, rostros y paisajes del maritorio chileno, reúne la primera muestra fotográfica itinerante: “Caletas de Chile: Patrimonio Cultural Costero”, dedicada a la pesca artesanal, su gente y al patrimonio cultural, social y económico que representa esta actividad en más de 540 caletas pesqueras existentes de norte a sur en Chile, 34 de ellas en la región de Valparaíso. La muestra, se enmarca en el quinto aniversario del Instituto Nacional de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal y de la Acuicultura de Pequeña Escala, Indespa, y reúne escenas cotidianas de la pesca desde el norte hasta el Cabo de Hornos, resultado del concurso convocado en julio por el instituto. La entrada es liberada y estará abierta hasta el 16 de agosto, de 10:00 a 17:00 horas, en el segundo piso del Mercado Puerto, l barrio fundacional de la ciudad. “Estamos cumpliendo cinco años, trabajando en promover iniciativas de fomento y desarrollo productivo, agregación de valor y diversificación productiva en el sector pesquero y acuicultor de pequeña escala, y quisimos destacarlo con esta muestra fotográfica que desde la mirada ciudadana nos invita a reconocer esta actividad productiva, su valor cultural y a incentivar también el turismo y fomentar el consumo de productos de la pesca artesanal”, precisa Leonardo Llanos Huerta, Director Nacional del Indespa. En este marco, el Instituto realizó el conversatorio “El mar y sus productos en la alimentación chilena y el turismo”, junto a exponentes de la pesca artesanal y del turismo. Chile cuenta con caletas de norte a sur, con una despensa marina enriquecida gracias a la corriente de Humboldt, y productos como el loco, el piure o el pastel de jaiba reconocidos a nivel mundial. Sin embargo, el consumo de pescados y mariscos sigue bajo con cerca de 14 kilos al año y nueve de cada diez viajes de turismo de las y los chilenos es fuera de Chile. Pamela Villagra Castillo, es directora de La Ruta de los Abastos (rutadelosabastos.com) de la región de O´Higgins, destacada hace unos días por la Revista Time como uno de los cien mejores lugares del mundo a visitar este 2O24. Este circuito de turismo gastronómico rural promueve diez rutas de productos, destinos y cocinas, incluida la Ruta de las algas y Un día en el oficio de marero, junto a algueros y recolectores de orilla de la cooperativa Los Piures en Pichilemu. “Es una herramienta de desarrollo viable, eficiente, de bajo costo y de gran para los territorios rurales… Nosotros lo primero que hacemos es diversificar la oferta productiva…no podemos producir mejor ni pescar mejores peces, lo que tenemos ya es muy bueno, pero el precio de mercado no es justo, el turismo lo que hace es darle valor agregado a este saber de las comunidades y lo pone en valor a través de la experiencia de turismo”, señala Villagra. Para Carlos Castro González, tercera generación de pescador artesanal de la caleta El Membrillo (@sanpe.dro2019) y promotor de la Fogata del Pescador, que en su última versión reunió 16 mil asistentes, “en la caleta siempre tenemos muchas ideas en turismo, estos eventos donde puede disfrutar toda la familia, el interés por seguir haciendo cosas así está pero se requiere de apoyo …la pesca está envejeciendo, es importante la renovación del registro para que el oficio no se pierda, y también que las escuelas vuelvan a visitar las caletas para aprender de sus productos y quehacer”, señala. Una apuesta en la que coincide Meyling Tang Ortíz, socia fundadora de Tres Peces (@trespeces), el primer restaurante de pesca responsable nacido en Valparaíso, quien apuesta por el turismo gastronómico o turismo azul, como dice, a partir del trabajo cooperativo y en red con pescadores y pescadoras artesanales, que ponga en el centro el relato, la tradición y la actividad pesquera y acuícola de pequeña escala detrás de cada producto marino que llega a la mesa. En la misma línea, Felipe Narbona Muñoz, fundador y director del operador turístico Ecomapu Travel (ecomapu.com) y presidente de la Asociación Gremial Barrio Puerto, señala como trinchera, la oferta desde los barrios y su identidad, como fue el año pasado la celebración del día de las Calugas de Pescado en el Barrio Puerto o la ruta Platos con Relato de Turismo Gastronómico por el Barrio Puerto y las visitas junto a pescadores en la Caleta Portales. “Existe interés por estas experiencias, principalmente en turistas extranjeros, pero tenemos que avanzar en los permisos que faciliten su oferta”, comenta. Pamela Villagra confía en que el modelo de turismo gastronómico es el camino. “Estamos recibiendo a norteamericanos y brasileños en un lugar donde no habían llegado, visibilizando los pueblos, lo rural, que es el nuevo lujo de Chile, y los atributos mareros artesanales, de familias de pescadores, oficios ancestrales, que es lo que la gente quiere venir a viajar y a conocer. Estamos diciendo que hay una nueva forma de viajar que es comiéndose Chile y aprovechando su patrimonio alimentario”, concluye Villegas. En la actividad, participaron representantes de la municipalidad de Valparaíso, el seremi de Economía, Fomento y Turismo, Marcelo Arredondo, pescadores artesanales de las caletas Portales, Membrillo, Quintay y Juan Fernández, la Mesa de Mujeres de la Pesca Artesanal, representantes del gremio turístico, de Sernapesca, Subpesca, IFOP e Indespa, Fundación Capital Azul, y docentes de la Universidad de Valparaíso, entre otros asistentes.