10 de octubre de 2024
Los residentes de los sectores limítrofes entre San Antonio y Cartagena están viviendo una verdadera pesadilla. Desde hace meses, enfrentan ataques nocturnos, vandalismo y robos en sus hogares, sin recibir una respuesta efectiva de las autoridades.
Lo que alguna vez fue un barrio tranquilo, hoy es escenario de delincuencia constante. En Brisas del Mar Alto y Ruiz Tagle, las noches están marcadas por el miedo. Piedras y trozos de concreto vuelan hacia las casas, destrozando ventanas, techos y parabrisas, mientras los ladrones despojan a los vecinos de sus pertenencias.
Alejandro Rojas Guerrero, vecino de la zona, expresó la frustración que siente su comunidad. “Llevamos tres meses soportando estos ataques. Nos lanzan piedras y hasta pedazos de cemento en las casas. Mi camioneta tiene el vidrio roto, y aunque no puedo estar seguro, todo apunta a que es parte de lo mismo”, comentó con pesar.
La situación ha empeorado a tal punto que lo que inicialmente parecía un conflicto entre algunos jóvenes, se ha extendido, afectando a varias viviendas. “Nos dimos cuenta de que no era algo aislado. Al menos siete u ocho casas están pasando por lo mismo”, agregó Alejandro.
La inseguridad es una preocupación constante para los vecinos, quienes también denuncian la falta de respuesta por parte de las autoridades. Jaqueline Rojas, presidenta de la Junta de Vecinos Ruiz Tagle, expresó su indignación: "Aquí hay robos todos los días. Hace poco vaciaron las casas de algunos vecinos, no dejaron ni los galones de gas".