29 de noviembre de 2024
En una jornada marcada por la reflexión y el compromiso con la comunidad, el proyecto de la ONG Huellitas de Boco llevó a cabo una actividad educativa con estudiantes, destacando la importancia de la tenencia responsable de mascotas y el cuidado del entorno. Esta iniciativa es financiada por el Fondo de Fortalecimiento de Organizaciones de Interés Público del Ministerio Secretaría General de Gobierno, reafirmando el compromiso del Estado con proyectos que impactan directamente en la comunidad.
La actividad, realizada en el refugio de la ONG, contó con la participación de la Seremi de Gobierno de la región de Valparaíso, María Fernanda Moraga quien destacó el impacto positivo de iniciativas como esta. “Cuidar nuestro entorno y los animales que forman parte de nuestra vida es fundamental para construir un espacio mejor para todos. Este proyecto, como lo ha dicho nuestro presidente Gabriel Boric, refuerza que los niños y jóvenes no solo son el futuro, sino también el presente, y son claves para generar cambios culturales”, señaló la autoridad.
La vocera subrayó la importancia de que las organizaciones sociales sigan postulando a este tipo de fondos. “Estos recursos son de ustedes, de sus familias, y deben ser bien utilizados. Proyectos como Huellitas de Boco son un ejemplo de cómo el financiamiento público puede generar cambios positivos y sostenibles en nuestra sociedad”.
La actividad contó con la participación de estudiantes del Instituto Marista de Quillota, quienes, junto a sus apoderados, realizaron donaciones al refugio y compartieron con los animales rescatados. La profesora Yohana Bahamondes enfatizó el impacto educativo de esta experiencia: “Sacar a los niños del aula y mostrarles otras realidades es esencial para formar conciencia sobre la responsabilidad que implica tener una mascota, que es parte de la familia y requiere atención y cuidado constante”.
Por su parte, Paula Herrera, encargada del refugio Huellitas de Boco, destacó el rol fundamental del financiamiento estatal para la continuidad del proyecto. “Acceder a estos fondos nos permite fomentar la tenencia responsable y educar a través de actividades prácticas. Aunque el cambio cultural que buscamos no es inmediato, cada niño y niña lleva una semilla de reflexión que puede generar un impacto significativo en el futuro”.
Este proyecto, que ya lleva tres años consecutivos de ejecución, se enmarca en la línea de niñez y tiene como objetivo fortalecer el vínculo humano-animal a través de la educación y el trabajo comunitario.